viernes, 6 de noviembre de 2015

En mí



Me habitan Nietzsche, 
Cortázar,
El Che. 
Me dictan Jauretche, 
Sabina, 
La biblia y un calefón. 
En mí también vive el asado con vino 
Y las patas arriba de la mesa. 
El ángel grisáceo de Dolina 
Y sus carnavales decadentes de Boyacá. 
La pelota descosida de la calle Uruguay,
Y la bacha de mi primer trabajo. 
A veces me habla la crudeza de Sábato, 
Otras, un desprolijo Norberto Napolitano. 
Como si fuera mi cabeza el runrún de un bar,
Con vasos 
Con hielo 
Con chorros de soda 
Y bandejas como estrofas que 
Patinan sobre mi corazón macizo. 
Me grita el mañana 
(Y me toca el hombro el ayer). 
Me llora un sauce del Ñandubaysal 
Y el Zapallo del Parque Unzué,
El mate amargo 
Y un puro del tío Jorge. 
Me zumba Luca Prodan,
Benedetti con su let the wind speak
Y la merienda en la 55.
El murmullo de Andrelo, 
Mientras Bécquer le pone rima a mis muertos. 
Llevo el hambre 
Y la panza llena, 
El peso en la espalda de un bolsillo vacío
Y la suerte de una cama caliente. 
El barro, 
La helada hoja en blanco, 
El aplauso, medalla y beso. 
Soy hablado, atravesado, usado, 
Médium de ausencias celestes. 
Cada rumor que vive en mí 
Me empuja hacia adelante. 
Algo habrá de venir. 

lunes, 21 de septiembre de 2015

Cuando esa mañana de Septiembre me avisaron que mi amigo Ariel Agostini había fallecido, yo todavía estaba entre sueños. Oí a media mañana que el teléfono de casa sonó y que atendió mi vieja. No sé si lo soñé o fue así, pero tengo en mente que ella hablaba algo pausado, en voz baja. Segundos después me despertó con la noticia. Mi cabeza permaneció sobre la almohada unos instantes hasta finalmente entender que Ariel, mi amigo y compañero de banco en el Naciones Unidas, se había ido para siempre. 
Su llegada al colegio debió haber sido dura para él. Yo la había pasado fea también cuando con mi familia nos mudamos de Wilde a Monte Grande en el ochenta y ocho. Fue para mí empezar quinto grado rodeado de caras nuevas, y ver a algunos de mis flamantes compañeritos codearse y sonreír, era una sensación de paredes que se me caían en los hombros. De hecho, creo que no repetí quinto grado un poco por lástima y otro tanto por la elocuencia de mi madre, que fue a hacer bombo para que no me sometieran a un nuevo destierro de compañeros. 
Volviendo a Ariel, a pesar de que era bastante cascarrabias y nos llevaba a todos un año y algo, terminamos los dos siendo muy amigos. Por cierto, Ariel fue mi primer gran amigo, de esos con los que empezás a hablar cosas de grandes. Después por supuesto tuve otros amigos, muy buenos, algunos duran hasta hoy. Pero Ariel era de esos pibes que sin ser un adulto, tenía otra mirada de las cosas, diferente a los que éramos más pendejos. No tengo dudas que antes de conocerlo había pasado momentos duros, de esos que te hacen crecer de golpe. 
De él recuerdo su voz, su andar cansino, su risa. Es el día de hoy que me emociona el disco “El amor después del amor” de Fito Páez, y me veo como si fuera ayer escuchándolo con él en su casa de Barrio Lindo o en algún Cumpleaños de Quince sobre Pavón. “Qué poesía”, me decía. 
Ariel era flaquito, con pelo algo rizado y bien corto, usaba anteojos y la ropa que llevaba parecía siempre quedarle grande. Sin entrar en muchos detalles, en las primeras charlas me contó que había perdido un año de escuela porque le habían hecho una operación de corazón. Y me mostró la cicatriz. Yo ya había visto una cicatriz parecida a esa en una tía. Pero verle el pecho así a un compañero de escuela casi de mi edad, a mí que no me cuesta nada, me impresionó. Obviamente Ariel tenía restringida la actividad deportiva, pero acudía a gimnasia a dar el presente como todos.
Con él fui a varias matinés de un boliche de la calle Dardo Rocha. Eran los primeros bailes y también épocas difíciles en casa. Alguna vez me prestó plata para la entrada también. Nos encontrábamos en la esquina de Pizza Piú a eso de las siete, pasábamos alguna que otra vez a jugar un fichín por Fascination y caminábamos después unas cuadras hasta Boxer. ¡Nos cagábamos tanto de risa en las mesas de los teléfonos! 
Ari era bastante más estudioso que yo, a lo mejor porque debía demostrar en la escuela que estaba a la altura de la oportunidad por la vacante aceptada. No sé, quizás son ideas mías. Habíamos comprado algunos libros entre los dos para ahorrar unos pesos y se enojaba mucho porque yo los escribía con lapicera. “Sos un boludo, a fin de año no se los vamos a vender a nadie”, me recriminaba. 
Qué difícil fue volver a clase después de su muerte. El resto del año no quise compartir el banco con nadie. Esa silla vacía era de Ariel. Y puta si lo extrañaba. Yo estaba descolocado, tratando de entender algo que nunca entendí. Porque la muerte de un amigo a esa edad, ¿cómo se explica? 
Ese domingo fuimos a su velatorio todos los compañeros y algunos profesores. Y aunque algunos insistían, yo no quise verlo. Preferí quedarme con la imagen última que recordaba de él, que es la que hoy aún guardo, sentados los dos en el piso, hablando de música y los goles del Manteca Martínez.

viernes, 3 de abril de 2015

Cuando me miras

Cuando me miras
Qué dificil explicar
Con palabras no lo puedo contar
Cuando me miras 
Y si sonreis
Todo alrededor es luz
Cuando sonreís 
Yo no lo puedo explicar
Que linda sesanción cuando te veo bien
Cuando tus ojos caen a descansar
Y llega la paz
Qué difícil explicar
No se puede contar
Este rayo de luz desde la persiana
Que llega a tu mano
Esta arruga en la almohada
Que juega con tus pies
Cuando me miras
Qué dificil explicar
Cuando me miras
Cuando sonreís
Ay ay ay
Cuando me miras

Creo

Me dijo: 
“Creo que no se puede vivir las veinticuatro horas maquinándose dentro de la desmesura. En ese sentido no hay bocho que aguante. 
Creo que forzarse estados de ánimo para agradar y no quedarse afuera no lleva a otra cosa que a la autodestrucción. 
Creo que la mediocridad es necesaria de vez en cuando. Como una sombra fresca ante el agobiante solazo de la autoexigencia. 
Creo indispensable también dejar fluir las cosas del corazón. Aunque estoy seguro que hay que saber sacar la calculadora del desamor en el momento justo por más que mate ilusiones ajenas.
Creo que el futuro no es sino un espejo roto. Lo espío, pero no le creo demasiado.
Creo que las manos están atadas por las venas de cada uno y no por sogas de afuera. Pensarlo al revés es de cómodo y cobarde. Hay que hacerse cargo viejo.
Creo que el mundo esta contaminado por el exitismo y la mentira, los mandatos, los sellos, las firmas. Ah, y por los mocasines y las corbatas.
Creo que hay cosas que me hacen mucho más viejo que el paso del tiempo mismo, lo cual debería ser una revelación para el mundo entero, ya no como historia personal, sino como un verdadero descubrimiento científico.”

Dejaré de dolerte

Le dijo en la parada del 306:
“…Y vas a olvidarme,
Un día mi cara se irá
Dejarás de pensarme
Como nadie piensa 
Un 20 de agosto
En la Nochebuena y Navidad.
¿Quién recuerda el dolor de muelas
Cuando deja de doler?
Nadie piensa en el tiempo
Que perdemos nombrando al tiempo,
Ya dejaré de dolerte
Y vas a olvidarme, ya lo verás…”

Atención

Va a intentar probar que hay vasos con agua y hielo en cualquier infierno, si uno sabe mirar bien. Y que el paraíso tiene el decorado de cartón si el ojo se pasa de rosca con la exigencia. 
Quiere demostrar que existe el equilibrio, poniendo a un lado de la balanza kilos y kilos de risas y del otro algunos litros de lágrimas. 
Va a mostrarnos que no hay alumnos, sino solamente maestros enseñándose diferentes cosas. 
De un lado va a poner el amor, del otro la indiferencia. 
De un lado la noche, del otro el día.
Va a caminar sobre un cable a mil metros de altura. En un hombro va a llevar la salud, en el otro, la enfermedad.
Para refutar eso de la “linealidad del tiempo” y proponer su paradigma “circular” va a elegir al azar un diario del ´82 y leer la página 26 para apostar que alguien escribió lo mismo en el diario del martes pasado.
Va a volar en el fondo del mar y va a nadar sobre la cordillera con las mismas manos que soñó el domingo.
Todo eso va a hacer, solamente para demostrar que hay que andar más atentos a ciertos detalles.

¿?

Que no eres dueño de nada
Sino mero administrador,
¿Qué te parece?
No me asusta,
Me quita peso.
Que antes de tu llegada
El mundo ya giraba,
¿Cómo te suena?
No me sorprende,
Mi ego no llega a mi frente.
Que solo estás de paso
Y serás enterrado y olvidado,
¿Cómo te pega?
No me detiene,
Para ese entonces
Seré ya otra historia
Sin pasado, como ahora.

Nonsensical (quemando flores)

Nonsensical (quemando flores)
Qué cerca estoy del cielo
Y mis pies pegados al suelo
Extrañaba tu olor dulce
Y la seda en la lengua
Tu amor natural
Llega como bocanada
Para inflar mi pecho
Va mi sonrisa colgada
Del trapecio de tu cielo
Una caricia en la boca
Y en el alma cuando te beso
Bambolea mi corazón
Y brillan tus ojos para mí
En este mar movido
El agua salpica mis pies
El dolor no me alcanza
Mientras esté en tus brazos
Llanto feliz, vida en fin
Otro mundo desde mí
Nace y se refleja en tus ojos
Que brillan para mí
En cámara lenta tus manos
Como hojas que mueve la brisa
Retocando el sentido del tiempo
Y me encanta
Verte tan vulnerable
Y tan valiente a la vez
Qué cerca estoy del cielo
Y mis pies pegados al suelo
En mi tapita de Sevenup
Prefiero soñar
En este mar movido
Dejarme llevar por el viento
Qué cerca estoy del cielo
Y mis pies pegados al suelo
Extrañaba este olor dulce
Y tu seda en mi lengua.

Nueve años

En ese punto 
Invisible e indivisible
En el que el dolor
Se hace alivio,
Ahí donde la eternidad
Y
El instante se dan la mano,
En la línea borrosa
Donde los mares se mezclan
con los ríos
Y
La distancia al sol
Se mide
en un chasquido,
En ese punto
Imperceptible
Donde el olvido
Conversa con las raíces
del amor,
O quizás en el sueño que recuerdo
Haber soñado con vos,
En la jaula de algún pájaro solitario
Que recibe visita un domingo,
O en la telaraña
De mi sala de espera
Que aún te espera,
Ahí donde la fiebre
Se hace hielo
Y
La sal es azúcar,
En las pupilas dilatadas
De tus ojos frente a la luz,
En esa última mirada nuestra
Sin saber que no había nada más,
…Quiero decir,
Donde los imposibles
Se hacen posibles
Y donde yo pueda
Parirte en mi corazón,
Ahí voy a encontrarte
Bajo la sombra de tu recuerdo
Vieja mía, mi querida vieja.

2014

La flor de la vida

En la frontera entre Italia y Austria, en el remoto Monte Coglians, crece la increíble flor del coraggio, también conocida como la flor de la vida.
La particularidad de esta flor es que vive apenas siete días.
Hermosamente blanca, alcanza su máximo esplendor al día seis, luego de dejar caer su semilla para renacer eternamente y comenzar así su último tramo de vida. Una vez que su brote asoma, dedica su último día a proteger del sol al pequeño hijo. Resulta sorprendente notar cómo con su tallo fuerte y hojas angostas consigue un lento movimiento desde el amanecer hasta el ocaso para cubrir a su sucesor. Y es impresionante ver el momento justo en que comienza a marchitarse, ya que para ese entonces su hijo ya está lo suficientemente fuerte como para enfrentar el sol y la nieve del segundo día.
La flor del coraggio sabe que al menos uno o dos días de su vida fugaz habrá vientos que intentarán interrumpir su crecimiento. Para sobrevivir, se prepara para enfrentar la tormenta de pie. Si se esconde, muere.
Al menos una vez de su corto paso sabe que será alimentada por la lluvia, pero debe estar atenta y sus raíces predispuestas a recibir el agua. Si se distrae, puede morir.
Ella no se esfuerza para alcanzar su plenitud y luego extinguirse. Esta flor se siente libre cada día y esa es la única forma de lograr su verdadera plenitud.
Lo curioso es que a los ojos de los hombres, su belleza se hace visible apenas unos minutos antes de desaparecer. Esto la ha convertido en un símbolo de lo fugaz de la belleza de la juventud, pero también en ícono de valentía y amor para sobrevivir eternamente.

Chin-Tsu

Cuenta la historia que en la ciudad de Chang´an, en la antigua China, vivió un artesano llamado Chin-Tsu, quien se enamoró perdidamente de la hija del general Zhang Qian. Luego de años de esmero por conseguir el corazón de la joven y la posterior aceptación de su padre, Chin finalmente le propuso casamiento. Zhang Qian, que veía a su hija perdidamente enamorada del humilde artesano, aprobó con celos de padre la unión de los jóvenes y Chin fue el hombre más feliz del mundo. Durante todo ese año el pueblo se dedicó a organizar la fiesta más grande que se haya visto jamás, que habría de llevarse a cabo el verano siguiente.
Inesperadamente, faltando tres días para la boda, la hija del general murió por causas naturales. Chin no soportó su muerte y lloró desconsoladamente por años, sin conseguir asumir la partida de su amada. Una noche, animado por algunos tragos de huangjiu, Chin decidió ir a pie hasta el solitario templo donde se veneraba al Dios del olvido Cham-Pang, para rogarle que le aliviara el incesante dolor por la ausencia de su amor. Al llegar al templo, luego de seis días de ardua caminata, rezó durante tres soles y lunas corridos. Al terminar sus oraciones, ya exhausto, elevó la cabeza hacia el cielo y suplicó: “Te ruego Cham-Pang poder olvidar, ya no puedo vivir así. Prefiero morir en este instante si no puedo olvidar”. Chin-Tsu durmió esa noche en el umbral del templo y al día siguiente, antes del primer rayo de sol, emprendió el regreso a su pueblo.
En el camino de regreso, víctima del fulminante sol y la escasa cantidad de agua que había bebido, se desmayó antes de alcanzar la flaca sombra de una acacia. Horas más tarde, un arriero que pasaba lo encontró y lo cargó en el lomo de su yak para socorrerlo y llevarlo a su casa. Chin durmió profundamente, hasta que consiguió despertar a los seis días de estar allí. Al abrir los ojos vio parado a su lado al arriero, quien sostenía de la mano a su hermosa hija. El arriero entonces le preguntó: “¿Quién eres?” Y Chin, confundido pero nuevamente enamorado y sin quitar la mirada de la joven, le contestó: “No lo sé, no recuerdo absolutamente nada”.

Cuánto te quiero

Busco mil veces explicar
Cuánto te quiero
Y las palabras no vienen,
O se esconden detrás de momentos 
Y me distraigo,
Entonces las palabras sobran
Afortunadamente.
Igual pienso
Que
Aunque se dejaran ver
No explicarían
Nunca
Tanto
Amor.
Y pienso mil veces más y
Puedo jurar
Que más que a mí te quiero.
Quizás
Comparar una gota
Con el mar,
Un punto
En el cielo,
Una coma
Contra la misteriosa eternidad.
Y entonces las ideas faltan…
A veces tengo miedo, es verdad.
Y al rato pienso mil veces más
Que estás en mí como
La madera en el árbol,
Como en la música está el aire,
O como el agua en un brote matinal.
Y todo explica nada,
Pues no existen las palabras
Para un amor tan real.
Y vuelvo a pensar que
Por vos es mi vida y que
La daría sin dudar.
Y el miedo se hace pedazos
Y pienso y pienso sin parar
Que mi alegría es
Hoy,
Y no hay nada que importe más.
Y perdón que repita pero
Puedo jurar
Que más que a mí te quiero,
Y que las palabras seguirán
Siempre
Sin contar
Cuánto te quiero

Simple

Desde chico tuvo que ver con cierto mecanismo de defensa, o de osar mojarle la oreja a la finitud de esta vida. Es esa inocente ilusión de creer que un desconocido un día leerá algo de lo que escribí cien años atrás (que es hoy o ayer) y será entonces resucitar. Cuantas noches infantiles -y no tanto- me ha salvado la vulgar e infundada idea de creer que a través del arte uno puede ser inmortal. Es tan mágico e inconsciente como creer que uno se hace eterno a través de los hijos. Es amortiguar el golpe, es preparar el lecho inexorable, es el susurro insoportable de la mosca personal. Y escribo, como quien no quiere la cosa, de un solo plumazo y para volver a respirar:
Simple,
Agua,
Aceptar,
Soltar,
Simple,
Fuego,
Decir,
Presente,
Reir,
Simple,
Aire,
Amar,
Perdonar,
Simple,
Tierra,
Sexo,
Olvidar,
Seguir,
Besar,
Abrigo,
Irse,
Es simple,
Te juro que
Es simple”

¿Azar?

La fuerza natural y las leyes de la física. El espacio, accidental y accidentado. La ciencia, los neutrones y protones. Átomos, naturaleza, inicial y finalmente el Universo. Las estrellas, el oxígeno, hierro. Los planetas. El sol y los miles de millones de años. La química, el azar, los virus. La vida, los cuerpos. Los mares, los vegetales, la supervivencia. Herramientas, músculos, lenguaje y comunicación. Interpretación y entendimiento. 
Nacimos. Nos vimos. Más fuerza natural, más física y química. Nuestro espacio, accidental y accidentado. Estrellas, nuevo oxígeno. Lenguaje y entendimiento. ¿Azar? Amor. Evolución.

El artista

El joven Rey hizo que al viejo pintor le quemaran los ojos y cortaran las manos por no poder reinar en los colores de sus crepúsculos o en el azul perfecto de sus mares. “Ni las flores, ni las mujeres más hermosas de mi reino consiguen si quiera acercarse a las de tus telas. He crecido entre paredes, en completa soledad, contemplando tus cuadros cada noche, creyendo que eso era el mundo. Hoy, que lo he descubierto me siento engañado, y eso, es imperdonable.”
El viejo, con su voz tranquila le contestó “¿Acaso qué culpa debe cargar este humilde pintor por intentar crear un mundo más bello que el real?” 

Ahora

Bastante poco habrá de importarme
Aquello que de mí se diga
Si no me importa ahora
Menos aún cuando me despidan
¿De qué sirve el epitafio?
O que digan ¡fue tan bueno!
Yo me quedo en este brindis
Y tu abrazo fuerte y sincero
Cuántas veces he sentido
Que el cuerpo es lo que estorba
Que el tiempo todo acomoda
Y tarde o temprano te encorva
Jugar el juego de la vida
Si lo que buscamos es ser queridos
No hay que perderse ni marearse
En este inmenso laberinto
¿Adónde encontró el alquimista
Aquello grande que buscaba?
Recorrió el mundo entero
Y estaba bajo su casa
A cada barco le llega su muelle
Y a todo verano el otoño
A cada fuego su ceniza
Y al corazón su responso
No hay heridas que no cierren
Ni lágrimas que sean perennes
No han venido y se han quedado
Las tormentas para siempre

La grieta de siempre

Una vez conseguidos los fondos necesarios, finalmente se decidió pintar el Teatro Municipal. Estaba tan caído pobrecito… Se ofrecieron para la tarea algunos vecinos, grandes y chicos. 
Damián, uno de los jóvenes con mayor entusiasmo, comenzó por lijar uno de los muros más altos. Luego de un rato, percibió en la pared una grieta enorme. Esto es muy peligroso, puede derrumbarse, pensó. Rápidamente dio aviso al encargado de la obra, un hombre mayor que conocía el teatro casi desde su nacimiento. La respuesta del anciano, que parecía estar esperando el aviso de Damián, lo dejó boquiabierto: “Pibe, la grieta siempre existió, solo que siempre la hemos disfrazado para que no se viera. Hizo falta tu fuerza para retirar la vieja pintura sobrante para dejarla a la vista nuevamente. ¿Realmente tu intención es rellenarla y afirmar el muro o solo volver a maquillarla como siempre se ha hecho? El teatro está en tus manos.”
Damián no entendió nada. Siguió lijando y lijando sin parar. Mientras tanto en su cabeza no dejaba de pensar en grietas, muros, maquillajes, derrumbes y disfraces.

Mejor hasta mañana

Hoy quiero hablar de los hilos de las caretas que sostienen superficiales viditas de cartón. O del pobre caballo que atado a una silla dormita y sacude levemente las mandíbulas con la mirada perdida. 
Tal vez del árbol terco que busca inclinación hacia el sol y sufre con lágrimas espesas las guías de alambre que pretenden enderezarlo. 
O de la frase esa de Andrés que dice que la vida es una cárcel con las puertas abiertas. 
Yo quiero hablar del sendero de las vaquitas, del mal pero acostumbrado, del quéselevaahacer.
Podríamos hablar, si a alguien le interesa, de los placares llenos de ropa que no usamos, de ver o mirar, de decir te quiero o dormir de espaldas.
Quiero hablar de la escuela y/o de la fábrica de ladrillos. O de la mano derecha que me persigna y la izquierda que hace fuck you. Hablemos, porque nadie va a negarlo, de lo importante que es un televisor por habitación y un Aleph sosteniendo la pata de la mesa.
Si hay tiempo, podemos hablar de peces en peceras, de canarios en balcones, de delfines en acuarios o de tortuguitas patinando en mosaicos.
Si todavía queda algo de vino y no se ha hecho de día, podemos nombrar al menos de costado la devaluación escalonada de la moneda lealtad.
Al final podemos también sumar con los dedos de una mano los abrazos que dimos en el último año, y con calculadora las puteadas. Hablar de principios. De la palabra. De la biblia y el calefón. De prejuicios, de tocar de oído.
Sí ya sé, es aburrido hablar de todo esto. Mejor será hasta mañana.

Seguiré escribiendo

Mientras el corazón y la cabeza
Continúen su eterno debate,
Mientras de la tierra mojada
Exista el perfume suave
O la luz del sol y la luna
Siga iluminando momentos universales…
Yo seguiré escribiendo.

Mientras haya preguntas
Sobre mudas almohadas,
O incansables canciones
Que al amor le cantan...
Mientras haya labios,
Almas, lágrimas, suspiros,
Recuerdos, alguna esperanza...
Yo seguiré escribiendo.

Mientras girando el mundo siga,
Las noches azules pasen
Y las claras mañanas lleguen...
Mientras tu cintura espere
A mis manos urgentes
Que saben cómo tocarte…
Yo seguiré escribiendo.

Mientras dure del amor el eco,
O la resaca de mis noches pasadas.
Mientras el sexo y el amor
Se tomen y suelten las manos
Caminando a veces juntos
Y otras tantas separados…
Yo seguiré escribiendo.

Yo seguiré escribiendo
Porque es de mí lo que mejor sale.
Mientras pueda ver mi sombra,
O acaso en mi agonía,
Habrá una mano amiga
Que en el papel desierto amable
Mis palabras libre plasmadas.

sábado, 16 de noviembre de 2013

El alma queda

Las palabras se las lleva el viento,
Porque ellas son del viento.
El río se lleva las penas,
Y en el mar las convierte en sirenas.

Los cuerpos se los lleva el tiempo,
Porque la carne es del tiempo.
Con luz el sol la oscuridad llena,
Y así las almas para siempre quedan.

Así como el desierto eterno es de arena,
El agua deshace lentamente la piedra.
Y en alas de mariposa va la belleza
(Porque sin fugacidad no es belleza).

Los hijos también se los lleva la vida,
Porque los hijos son de la vida.
Como un corazón que juega,
Y libera su sangre a las venas.

Las palabras, las penas,
Los cuerpos, la belleza,
La carne y los hijos,
Todo pasa, el alma queda.

domingo, 27 de octubre de 2013

Viajar en foto


     Me contaron el sábado en el bar Mac Perro de la Paternal que en el barrio de Mataderos vivía un anciano con ciertos poderes sobrenaturales. Uno de ellos, el más admirado por los vecinos, era el de conceder a cualquier fulano que le diera veinte guita el deseo de meterse literalmente en una foto vieja. Y cuando digo “meterse” es meterse de verdad, viajando a ese lugar y momento sin ser percibido por los presentes en la foto. El único requisito para llevar a cabo el experimento es que el viajante interesado no haya estado allí en el momento del click.
     Nunca se supo bien cómo lo lograba. Lo cierto es que alguien iba con una foto, el “mago” –como se hacía llamar- la revisaba durante unos minutos y luego de unas preguntas puntuales referidas a la situación retratada, le daba al visitante un brebaje del color del Fernet que tenía que ingerir de un solo trago. Dicen los que probaron este preparado que tenía un gusto espantoso y que la fórmula era tan secreta como la de la Coca Cola. Cuentan también que a los pocos minutos de haber bebido a fondo blanco esa especie de vascolet, se entraba en transe y casi inmediatamente se caía uno redondo al suelo. Allí empezaba todo el periplo. De repente, estabas en la cancha de Almagro gritando un gol de Frondizi o caminando por Florida, rodeado de hombres con sombreros y traje, o subido al zamba del Italpark. Algunos maridos celosos han sabido viajar en foto para confirmar lo que todos en el barrio ya sabían. Eso sí, los viajes más solicitados eran los de quienes buscaban meterse en fotos familiares: observaban padres y abuelos sentados a la mesa de algún cumpleaños, ravioladas de domingo al mediodía, otros les conocían la voz a tíos segundos y vivían en vivo y en directo hechos que posteriormente se convertirían en anécdotas entrañables. En fin, los ejemplos son de lo más variados.
     El mago siempre advertía a quienes se le acercaban: “Sepa que si usted viaja en foto, allí no tendrá la posibilidad de expresarse, de tocar nada o hablar. Solamente estará ahí, como un fantasma, contemplándolo todo como un cuerpo de humo imperceptible, que atravesará las cosas y su voz será muda. Y algo importante: Nunca intente abrazar a nadie, puede provocarle a esa persona el mal de ojos por siete años”.
     Capítulo aparte merecería la capacidad de algunos perros de percibir estas presencias venidas del futuro. Automáticamente cuando el pichicho detectaba la presencia fantasmagórica, empezaba a ladrar y hacer círculos sobre sí mismo, tratando de morderse la cola. O se tiraba en el pasto, dando vueltas, refregando el lomo al suelo mientras el fantasma estaba allí.
     En los viajes hacia reuniones familiares, una clara señal de la presencia del viajante era que siempre se volcaba un vaso con vino. Los presentes exclamaban “alegría, alegría” mojando la yema de los dedos con el vino derramado y haciendo una cruz en la frente de los más pequeños.
     El aparecido en la situación, cabe aclararlo, era completamente inofensivo y nada que hubiera sucedido en el pasado se podía cambiar. En definitiva, el viajante  se convertía en testigo de lujo de situaciones que no había vivido. Era como si todo quedara grabado en una cinta secreta, y quien ponía “rew” y “play” de un acto de antaño, era el viejo brujo, haciendo que sus visitantes bebieran el brebaje mágico.
     Para volver a la realidad luego de la travesía, no había ningún secreto: a los veinte minutos de iniciado el ritual, el efecto de la poción simplemente comenzaba a menguar hasta desaparecer completamente. Entonces el desmayado despertaba ahí en la casa del viejo, con un fuerte dolor de cabeza que podía durar hasta tres semanas. Algunos recordaban poco y nada del viaje, y lo único que se llevaban a la casa era flor de chichón por el golpe de la caída. Otros lloraban de alegría y se iban a buscar miles de fotos para regresar. Pero el mago siempre les advertía que su bebida mágica no se podía ingerir más de una vez al año porque “tenía yerbas muy dañinas para el corazón”. De hecho, con cada preparado - podía llevarle meses elaborar unas pocas dosis- obtenía un máximo de cinco viajes, y aunque a ciencia cierta nadie sabe exactamente qué contenía aquél brebaje, algunos aseguran haber visto al viejo cazando sapos que luego hervía en vino patero, todos los 25 de Diciembre a la sombra de una higuera.
     Cuentan otras lenguas de la calle Andalgalá que un día nuestro hechicero le concedió a un viejo del barrio de Villa Crespo el deseo de regresar a un cumpleaños del año 1967 en el que supuestamente no estaba presente. El mago, además de revisar la foto y las caras, le hizo antes las preguntas de rigor para descartar su presencia en la foto. Nada hacía pensar entonces que este solicitante malintencionado podía estar allí presente. Pero en verdad, le había mentido, y el mago no lo descubrió. Lamentablemente no había notado que en el ángulo inferior derecho de la fotografía, un dedo de la mano izquierda del viejo se dejaba ver. La consecuencia fue nefasta: El engañador nunca más pudo volver de su viaje en foto, y es hasta el día de hoy que lo andan buscando por la calle Bragado, donde lo vieron por última vez. Los familiares del viejo saben pararse en la puerta del brujo a gritarle “hijo de puta, devolvenos al abuelo”, pero desde adentro de la morada nunca hay respuesta. Durante años la policía revisó la casa del mago al menos una docena de veces, pero tampoco han encontrado nada.
     Otra vez, se cuenta que el viejo estaba preparando la pócima y, un poco distraído, falló en uno de los ingredientes. Parece que estaba medio borracho y omitió incomprensiblemente el componente que  lo hacía a uno invisible en el viaje. Este componente no debía faltar, porque ser percibido de alguna manera por las personas de la foto era algo extremadamente peligroso. Imagínese usted haciéndose presente en un casamiento de antes de haber nacido para advertir a todos que el novio en realidad estaba enamorado de su cuñada. Algo que solo habría de saberse treinta años más tarde. Eso, sin aclarar que usted en verdad es hijo del novio y la cuñada. Además, el maestro que le reveló esta fórmula le había advertido que si alguna vez modificaba intencionalmente el brebaje y no lo utilizaba tal como se lo estaba describiendo, la peor de las maldiciones caería sobre él y toda su descendencia.
     Lo cierto es que el viejo una vez falló involuntariamente en el componente de la invisibilidad y le dio el brebaje a una mujer que le llevó la última foto de sus padres con vida. La foto era en una fiesta de quince del año 1985. La pareja había dejado a esa niña, hoy una mujer, al cuidado de su abuela para tener una salida solos. El hecho es que su padre en la fiesta bebió demasiado y ambos terminaron muertos en la curva de Turdera, con su Taunus rojo debajo de un camión cisterna. En este viaje en foto de la mujer, el brebaje accidentalmente estaba incompleto, la mujer lo bebió y a los minutos se hizo  presente en la fiesta con su rostro actual. Al pararse frente a ellos, sus padres la miraron, como viendo en ella una cara conocida -en ese entonces Susana tenía 3 años y ahora casi 30-. La mujer se abalanzó encima de su padre, que estaba completamente borracho y le suplicó que por favor se tomara el 165, que no manejara hasta su casa en ese estado. Personal de seguridad la sacó casi a patadas del lugar y por el escándalo terminó encerrada en una celda de comisaría. A la mañana siguiente cuando los policías la fueron a buscar, había desaparecido.
     Sorpresivamente de un día para el otro al mago nunca más se lo vio. Si uno anda por el barrio y pregunta a los más viejos, todos juran haberlo visto en la cancha de Nueva Chicago. Eso sí, no están seguros si ese recuerdo es de algún viaje en foto o del sábado pasado.Si me apuran, para mí se subió a la foto que más quería y se quedó ahí para siempre.  

sábado, 21 de septiembre de 2013

Fragmento de entrevista a Lucio Marchioni, pensador de cosas



…- Se puede decir que usted ha tenido que sobrevivir a algunas desgracias…
- En el libro de mi vida las desgracias han quedado en anotaciones al margen, son una especie de “letra chica”. Eso solo puede lograrse con los años, aprendiendo a olvidar y así volver a focalizar. Me gusta la palabra focalizar, porque tiene que ver con saber dirigir la energía. Creo que he tenido momentos maravillosos, de tristeza y de alegría.
- Perdón, ¿rescata la tristeza como maravillosa?
- Definitivamente, cualquier estado profundo de sentimiento visto a la distancia fue maravilloso, o por ejemplo el recuerdo que hoy ya estamos siendo, que es triste y maravilloso a la vez. Si uno no lo entiende de esa manera, si se encierra en lo trágico de la vida, nada de esto tiene sentido. Ni este vaso de vino, ni la música que suena en este momento. Pero además hay momentos que pueden ser alegres o de gozo. Esos momentos de éxtasis pleno hay que vivirlos, lisa y llanamente, sin pensar demasiado, sin culpas, sin arrepentimientos. Debe uno encerrarlos en un cofre bajo llave, en la retina y para siempre, para toda la vida. Recuerdo que una vez le planteaba a una amiga psicóloga “¿por qué algunas personas no se permiten ser felices sin cierta culpa, o demasiado atentos a que todo algún día va a terminar? Ella me respondió que en ellos pesa demasiado saber que luego del éxtasis viene la reflexión. Y, como quien sabe que va a caerse y golpearse duro, por las dudas va preparando el colchón. Una pena, porque en ese preparar el colchón, se distraen y no gozan.”
- Y hoy, a los ochenta y cinco años, ¿sigue esperando momentos de éxtasis?
- Tampoco soy un idiota que no sabe que la llegada no tarda en llegar. Pero fíjese que curioso, la mariposa, que antes fue oruga, no dejó de esforzarse en el proceso de metamorfosis, aún sabiendo que como mariposa viviría escasas horas. En definitiva, en esta vida yo creo que uno es oruga y mariposa a la vez. Oruga por el esfuerzo que hace para llegar a ser algo mejor y mariposa por lo fugaz del logro. En esta vida concreta, en la que usted y yo estamos aquí conversando, en fin, en la línea de tiempo de la eternidad, uno es un chasquido, un punto. En La Vida con mayúsculas, en un sentido amplio, de eternidad, uno siempre es puntos suspensivos.
- ¿Y qué sería a su criterio lo contrario a la muerte?
- El sexo es una de las patas fundamentales para explicar la muerte por su contrario. Thanatos y Eros. Los opuestos. No solo en un sentido de reproducción, de “perdurar” a través de los hijos, sino del deseo. La llave a casi todas las puertas es el deseo. Desear, desear, siempre desear.
-  Y otra de las patas sería…
- El alma como parte del Universo, encerrada momentáneamente en este cuerpo. ¿Con qué fin? A lo mejor tiene que ver con elevarse hacia cierta clase de perfección.
- ¿Pero acaso no sería el final si se alcanza esa perfección?
- La paradoja es que el final y el principio son la misma cosa. Imagínese un círculo en el aire. ¿Dónde empieza y donde termina la línea que le da forma? Nacer y morir, por ejemplo: dos polos extremos del mismo proceso. Siempre he sostenido que los contrarios son la misma cosa en diferente nivel de intensidad. Pero ese es otro tema, no quiero aburrirle. Cierro con esto: morir y vivir no son opuestos. Lo opuesto a vivir es no desear. Lo opuesto a morir es desear.
- Si volviera a nacer, ¿qué cambiaría de su vida?  
- Usted no ha escuchado. Yo volveré a nacer.

(Se levanta, cambia el tono y recita):

Con el alma de uno,
Hacia luz vamos.
Todo es agua, aire, humo,
Libre de cuerpo pesado.

Mañana o en mil años,
Lo que busques tendrás.
Nada se queda, nadie se va,
Ni tu voz, ni tu alma en soledad.

Todo se mueve
Aunque no lo veamos.
Una flor, el sol, el olvido,
Animal, vegetal, humano.

Golondrina que migra
No sabe adónde va.
Sólo sigue su destino
Esperando perdurar.

Fui jaguar en el pasado,
Soldado de Tebas  después.
Fui rey y esclavo un día,
Un triste malvón seré.

Nada es para siempre,
Nada material.
Ojo por ojo, diente por diente
Mañana o en mil años será.
 
Vuelve a tomar asiento, me mira y espera una reflexión que no puedo devolver. Toma el vaso, lo mueve en círculos y bebe hasta el final.

- Si ese Desear al que usted se refería antes es más amplio que el deseo exclusivamente sexual, sería –según entiendo- como un motor, el motor de la vida. ¿Podríamos decir que es una especie de proyectar pero improvisar a la vez?
- El deseo tiene que ver con el placer, con revalorizar la vida, y finalmente con la autorrealización. Desde ya que hay un deseo sexual, naturalmente. Pero creo que culturalmente el sexo está sobrevaluado. Un claro ejemplo de esto es la valoración que se hace de las personas según su inclinación sexual. Quiero decir, a mi entender la elección sexual es natural, sea cual fuere. En cambio la valoración que se hace de esa elección es cultural, y por lo tanto arbitraria. Es complejo el tema y no tenemos el tiempo para profundizar. Lo que quiero decirle en definitiva, si no fui lo suficientemente claro en un principio, es que cuando hablo del deseo sexual, quiero que se entienda en un sentido amplio, no solamente de reproducción o atracción por el otro. Es una metáfora para graficar la idea de ponerle a las ganas de cada proyecto y destino personal la misma intensidad que naturalmente se le vuelca al deseo sexual.
- ¿Y si no hay deseo sexual?
- Disculpe joven, ¿qué dije que era lo contrario al deseo?.



lunes, 13 de mayo de 2013

Kybalión


Infinito universo mental,
A los labios de la sabiduría abre tus oídos.
Como es arriba, es abajo;
Como es al este, es al oeste.
Al norte y al sur.
Nada descansa, todo se mueve y vibra,
Todo tiene dos cabos,
Su par de opuestos. 
Todas las verdades son medias verdades,
Las paradojas pueden ser arrimadas.
Todo fluye, fuera y dentro;
Todo tiene sus mareas;
Todas las cosas suben y bajan;
Humor, credos, naciones, modas.
El bamboleo del péndulo se revela en todo;
La medida de la oscilación hacia la derecha
Es la medida de la oscilación hacia la izquierda,
Y el ritmo compensa.
Para bien y para mal, compensa.
Toda causa tiene su efecto;
Todo efecto tiene su causa;
Nada es casual.
La noche sigue al día
Y el día a la noche.
De nuevo de vuelta:
Día y noche, luz y oscuridad
En equilibrio.
La muerte no es real,
Es mero cambio y perfección.
Es elevación y nacimiento,
Y a la vez giro al hogar.
Milagros y maravillas
Infinitas y vivientes
Jugarán a voluntad.
Infinito universo mental.
Abre los oídos y será Verdad. 

domingo, 14 de abril de 2013

¡Morella!



Vamos hija mía
Que todo ya empezó
Salgamos hija mía
¡El mundo espera tu voz!

Reina y princesa eres
Tus manos son de cristal
Tu boca endulza si quieres
Siete mares de coral

Eres tú gota de lluvia
En los tristes desiertos
Una viva llama que arde
En el frío del invierno

La moneda cayó en la fuente
Mis castillos vuelan sin pena
Tu corazón late fuerte
Con la fuerza de mis venas

Con envidia una estrella mira
Porque el tiempo está a tu lado
En tu noche que es mi noche
Vamos juntos de la mano

Si supieras cuánto espero
Tu sonrisa al amanecer
Ay tan solo si intentaras
No podrías entender


Vamos hija mía
Que todo ya empezó
Salgamos hija mía
¡El mundo espera tu voz!


martes, 5 de marzo de 2013

No quiero estar ahí

Es la puta muerte


Que nunca pierde

No me digas mi amor

que antes de mí vos también

te vas a ir

no quiero estar ahí

no, no quiero estar ahí...

miércoles, 6 de febrero de 2013

A thousand years

If you are there before the end

The end will must wait
A thousand years
Sitting and crying will wait
A thousand years…

I want a kiss from you
Just then my darling
Before we say goodbye
In my sky may have my own Jesus
A wide road to cross
An empty highway
Your name illuminated by lights…

Nothing to fear!
In a bed or on the floor
A perfect white doctor,
A glass of water by my side
A blue bag with my pants
Maybe go home, but not
I'm not there…

In infinite bridges the sun will rise
Light white wings in my back
Do not cry, it is really not that bad
Everything happens in a second
As a passing ray…

A sunbeam hugs me
I transform into light
My skin is made of diamond
By your hand holding me radiant
There are doors and a hill
I see you in this dream so real
That I can touch you asleep…

And if in the end you're next to me
It will have to wait a thousand years
Sitting and crying will wait
A thousand years…

viernes, 14 de diciembre de 2012

Sin título

          Por momentos me siento tan cerca de la Verdad que asusta. Soy de hierro. Después una hoja al viento. De hierro ahora, una hoja frágil, indecisa, casi muerta después. Hay momentos de Verdad que llegan y golpean. Verdad en un sentido trascendental, de la vida después de esta vida. Como quien en una noche puede pisar el séptimo cielo y sin escalas, a los segundos, sucumbir en el mismísimo infierno. Como quien entiende todo el sentido en una sola imagen, sin mediar palabras. Elevarse, alivianarse, iluminarse, iniciarse y sin remedio caer. Mas al rato vuelvo a estar dentro de mí: Carne y nada más ¿nada más? Pareciera que por instantes el alma del cuerpo se distanciara. Y después de tanta luz, nubes negras y la inexorable lluvia encarnada en llanto. Nada es cierto, nada que no pueda sentir. Tantos colores televisivos invaden los sentidos que me distraigo. Y a la noche, a segundos de cerrar los ojos, me hago de hierro y sueño. Hierro liviano pero invencible. Veo las calles, la miseria, la maldad. Veo a la vuelta de la esquina del basural un paraíso verde y un cielo límpido. Y al despertar vuelvo a ser hoja que mueve el viento. Me miro, ese soy yo. Al menos por fuera.  A veces logro entender… Y me explico: Los opuestos. Todo se complementa. Todo tiene su lado funcional. Nada puede ser completo en sí, algo externo nos da sentido. Pero a la vez yo mismo le doy sentido a eso externo previamente. La cinta de Moebius. La cultura, la historia, la religión, el costado animal, el sexo, la moral. Determinante. Siempre uno en relación a algo. Nunca una botella flotando sola en el medio del océano. Nunca se vio una estrella sola. El sol gira alrededor de la tierra. La luna ilumina la noche. Todo es en relación a alguien. La piedra que va desapareciendo por el viento que la gasta. Y eso la hace viva.  Los segundos, las horas, los años, la eternidad vista desde otro espacio. Mirarse. Detenerse. Razonar con el corazón, paradoja. Perdonar y perdonarse. Arrodillarse, todo un símbolo. Los siete pecados capitales. La alfombra roja y el barro. Trato de encontrar diferencia entre la muerte de mi cuerpo y la de un perro. Y no la encuentro. Y por momentos estoy tan cerca de la Verdad, que me asusto.  

sábado, 3 de noviembre de 2012

Dharma



¿Adónde estuvimos
Antes de nacer?
¿Qué finita obra
Actuaremos después?

Todo se renueva,
Todo se transforma.
Una vida no alcanza,
Una sola es muy corta.

Con el alma de uno,
Hacia luz vamos.
Todo es agua, aire, humo,
Libre de cuerpo pesado.

Mañana o en mil años,
Lo que busques tendrás.
Nada se queda, nadie se va,
Ni tu voz, ni tu alma en soledad.

Todo se mueve
Aunque no lo veamos.
Una flor, el sol, el olvido,
Animal, vegetal, humano.

Golondrina que migra
No sabe adónde va.
Sólo sigue su destino
Esperando perdurar.

Fui jaguar en el pasado,
Soldado de Tebas después.
Fui rey y esclavo un día,
Un triste malvón seré.

Nada es para siempre,
Nada material.
Ojo por ojo, diente por diente
Mañana o en mil años será.



sábado, 13 de octubre de 2012

Mi corazón

Estático como una piedra ancestral,


Olvidado en medio del desierto.

Gastado por el sol, la lluvia y el viento añejo,

Abandonado por quién sabe quién.

Solitario entre tanta soledad.

Triste, mudo, a veces helado,

Hirviente de dolor cada tanto.

Estéril, inútil, macizo y pesado.

Inexorablemente en pena,

Aullando hacia adentro,

Sordo, ciego, sin lengua, decapitado.

Al ancla de un galeón hundido atado.

En coma profundo, perdido,

Una y mil veces olvidado.

Ensombrecido hasta la exageración

Y luego hasta el fuego iluminado.

Sin lágrimas. Sin hoy, sin mañana.

Fundido, mucho más que roto, acabado.

Sin fe, sin reflejos, desahuciado.

Mezcla de velorio y entierro, desconsolado.

Sin tercer o quinto día de resurrección.

Llevado a su mínima expresión,

Inerte, rasgado, gastado.

De arena o sal sus tripas,

Ojos de algarrobo milenario.

Opaco, endeble, enfermo por opción,

Hundido por naturaleza, sin alma, nacido por error.

Artificial, de gris a negro, enfrascado.

Podrido, mal parido, torcido, aturdido.

Sin cordura ni razón, sin alarido.

Una brasa apagada, una llama helada.

Sin signos, sin cielos, estrellas ni lunas.

Sin cruz, sin altar, sin rezo moderado.

Vegetando, encerrado, como un pez ahogado.

Haciendo cola en la hilera de los milagros,

A la punta de una esperanza dormida va aferrado.

sábado, 29 de septiembre de 2012

Espina de pescado (rock and roll)

Caminando por el oeste
Esperas que algo cambie
Pero todo sigue igual
Es que nada va a cambiar
Es tu espina de pescado
Clavada en la garganta
Ella se fue hace rato
Con un nene de papá
Ella se fue y te encanta
Era dulce como la miel
Ella se cansó de tu overol
Vino uno y te jaqueó el rey
Te zumba la abeja de ayer
Tu vieja te espera el domingo
Y el lunes otra vez al taller
Tu llanto moja la leva
Cómo armar y dar otra vez
Si había receta ya se fue
El sol está tapado
Ella se fue hace rato
Con un nene de papá
Ella se fue y te encanta
Era dulce como la miel
Y sabés que no va a volver
Con otro la vas a ver
El sol está tapado
Es tu espina de pescado
Clavada en la garganta
Ella se fue y te encanta
Era dulce como la miel
Y sabés que no va a volver
No, ya no va a volver
Es tu espina de pescado
Y ya no va a volver...







martes, 25 de septiembre de 2012

Cuando seas grande

Cuando seas grande vas a entender
Que también hay lágrimas de felicidad:
Hoy lo descubrí, cuando te vi bien.

Vas a saber lo difícil que es decirte no,
Pero que es la forma de prepararte
Para derribar las paredes que vendrán.

Cuando seas grande y puedas ser sincero
Estaré tranquilo porque la verdad siempre prevalece.

Si puedes seguir adelante cada vez que caigas
Será porque además de caminar, te enseñé a volar.

Y si puedes soñar cuando el viento pegue fuerte
Será porque te enseñé que lo mejor siempre está por venir
Y que tu verdadera fuerza la medirás en apuros.

Sabrás ser justo y generoso si cuidas la amistad
De quienes estén a tu lado cuando no tengas nada para dar.

Que no te guardes abrazos ni te quieros
Y que la necesidad no te haga obsecuente.
Lo primero te lo he dado,
De lo otro aprenderás con el tiempo.

Que hayas comprendido cuando dije que
El que no arriesga no gana,
Pero tendrás que tener espaldas anchas
Para enfrentar las consecuencias.

Que sepas aceptar lo diferente, porque tú también eres diferente.
Que reír y llorar es tan sano como expresarte, sin mirar los dedos que te apunten.
Que la vida es un regalo que vale la pena vivir aunque a veces cueste respirar.
Que la libertad no existe, sino dentro de tu corazón.

Si no cargas mochilas ajenas pero ayudas al que lo necesita
Comprendiste que primero tú, pero nunca sólo tú.

Si debiste imponerte, que haya sido con la palabra y el fundamento,
Nunca con la fuerza y la necedad de los caprichosos.

Si piensas que entregarte por completo es ganar, ya has ganado.

Que si asumes que lo único que no tiene solución es la muerte,
Lo demás no debe acobardarte.

Que si tu palabra es tu honor,
Volverás a confiar aunque te traicionen.

Que si no te ocultas como una tortuga en su caparazón,
Serás pleno, completo.

Si pude enseñarte a escuchar,
Sabrás poner atención a ancianos y niños.

Y si no eres parte del rebaño por miedo a la soledad,
Entendiste que traicionarte no te honrará.

Si al ser grande recuerdas una bella niñez
Seguirás jugando, que es lo que cuenta en la vida.

Y si en tus últimos momentos te acuerdas de mí,
Ahí estaré esperándote para seguir jugando.

miércoles, 22 de agosto de 2012

Push start

The future has come

Machines ready to fight
Are you ready to hide?
Now you pray to your heart
To keep on beating fast
We are so lonely and day´s so dark
Push start push start
And then run to a yellow desert
Not to the blue ocean
It will not survive
Push start push start
Not to the heaven
It will rain tears dry
Push start push start
Right down to the hell
With your favourite gun
Children dying in a plastic bag
Big kings watching by
Are you ready to hide?
Are we like a lab rat?
Red eyes, dead hands,
And your soul will lie
Held in mortmain
The time is now
It´s too late to go back
Push start push start
The rat race has begun
To the cliff we ´re flying to crash
Push start push start
Game over say good bye

sábado, 18 de agosto de 2012

Don´t turn blue

Happy days are gone now
But good times will come
I don´t care about future
I just live for both
Yeah babe, I just live for both
In the morning you are so lazy
I love watching you
Touching you
Searching you
Like a bird in my song
Let me tell you
I need you
Don´t turn blue
Don´t run behind that man
That makes you cry
Please come back
I know…
Happy days are gone now
But good times will come
I don´t care about future
I just live for both
Yeah babe, I just live for both

jueves, 12 de julio de 2012

Yo pensaba

Yo pensaba, de chiquito yo pensaba…
Que nada se terminaba,
que escribiendo se curaba
Las ausencias y esa cara
falsa de la sociedad
Yo miraba como el viejo se exaltaba
Cuando el filo no alcanzaba
Me reía porque nada me faltaba
Aunque tampoco sobraba
Esperando que llegara la noche
Prendía mi velador naranja
Que giraba, con dibujos proyectaba
Ese mundo de inocencia
Que de a poco me tapaba
Bajo el manto de los sueños
Sin embargo en la almohada navegaba
Preguntando por mañana
Simulando valentía
Y ahora voy hacia la nada
El tiempo no es el mismo
Yo pensaba y me miraba
De grande me imaginaba
Lejos, muy lejos de acá
Lejos, muy lejos de acá
Será mejor dejar pasar
Estos sentimientos de tristeza
Será mejor dejarlos ir
Abrirles la puerta y que salgan al fin
Yo pensaba, de chiquito yo pensaba…